45 personas perdieron la vida durante 2019 en medio de accidentes de tránsito que ocurrieron en cinco corredores del área metropolitana de Bucaramanga. Vanguardia le informa algunas de las precauciones que debe tener en cuenta al momento de transitarlos.
El 36% de las muertes viales registradas en la ciudad durante 2019 ocurrieron en cinco corredores específicos, que son considerados críticos en materia de accidentalidad por parte de las autoridades.
Según la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Ansv, el año anterior se contabilizaron oficialmente en el área metropolitana 125 fatalidades, de las cuales 45 tuvieron lugar en cinco ejes viales, tres de ellos localizados en Bucaramanga.
Este listado de las vías con mayor índice de mortalidad lo encabeza la autopista entre Piedecuesta y Floridablanca, en donde el año pasado hubo 13 ciudadanos fallecidos en accidentes.
De acuerdo con las estadísticas de la Ansv, perdieron la vida seis conductores de moto y tres acompañantes, dos peatones y dos tripulantes de automóviles.
De hecho, la ciudadanía ha protestado y exigido intervenciones para arreglar un desnivel considerable que existe en el kilómetro 83+600, en inmediaciones de la sede de Cajasan. En dicho punto, tres madres que perdieron a sus hijos instalaron múltiples carteles como señal de advertencia para el resto de conductores.
La autopista entre la capital de Santander y Floridablanca es la segunda de este funesto listado. Se contabilizaron 11 muertes, de motociclistas (6), peatones (3), de un pasajero de moto y de un ciclista.
El exceso de velocidad es muy común en esta vía, en donde frecuentemente se registran colisiones debido a vehículos que intentan invadir o salir del carril de Metrolínea.
Sumado a la imprudencia, varios tramos de este eje vial requieren mejoras de infraestructura, como por ejemplo a la altura del polémico lote de Metrolínea de Papi Quiero Piña, en donde literalmente los conductores se ven obligados a sortear un ‘embudo’ y en donde ni siquiera están demarcados los carriles vehiculares.
El Anillo Vial entre Floridablanca, Girón y Bucaramanga es otra de las vías en donde se deben extremar las precauciones. El año anterior se registraron siete fatalidades, de las cuales cuatro personas conducían moto, un peatón, un conductor de automóvil y un pasajero.
La gran cantidad de tracto mulas, el alto grado de velocidad y el deficiente alumbrado público representan serios riesgos de accidentalidad para quienes transitan este corredor.
El cuarto lugar de este escalafón lo ocupa la vía que desde Bucaramanga conduce hacia Girón, por el sector del Colegio La Salle. Siete víctimas mortales contabilizaron las autoridades, de los cuales cuatro conducían moto, dos iban a pie y una persona más que manejaba automóvil.
En varios puntos de este eje vial los transeúntes no cuentan con infraestructura y señalización adecuada para sus desplazamientos. Faltan puentes peatonales y pasos de cebra en varios tramos. Muchos conductores suelen hacer caso omiso de los semáforos que allí existen, imprudencia que ha ocasionado varias emergencias.
La calle 45 de Bucaramanga cierra este top 5. En total siete ciudadanos perdieron la vida, cuatro de ellos iban a pie, uno iba en bici, otro en moto y uno más como pasajero de automóvil.
Los expertos han señalado que esta vía presenta “grados de curvatura” en varios tramos que merecen cierto cuidado por parte de los conductores. En algunas de sus curvas se han registrado volcaduras.